Se acabó, todo terminó, de una vez por todas, ya no hay nada más que decir. Me pidió un último beso, según él para afrontar el tiempo que quede hasta que alguien le quiera, o al menos se líe con él, y me parecía justo después de todas las putadas que le he hecho. Y ya está, a no ser que yo quiera, no volverá a insistir más, lo cual tiene sus pros y sus contras.
Ya no me hará sentir mal, ya no me dirá que le bese cada vez que nos despedíamos, ya... se ha acabado todo. No sé, por un momento lo he pensado y me ha dado coraje, después de tanto tiempo, no creo que alguien sea capaz de demostrar tanto cariño por mí, lo cual me gustaba mucho (y eso incluye las interminables conversaciones de chat). No, si... en el fondo tenía su parte buena, pero es mejor, mejor para ti, mejor para mí, mejor para... la gente en general.
Además, ahora si quieres puedes centrarte en Laura.
Se acabó.
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