sábado, 20 de julio de 2013

Si te vas, me quedo en esta calle sin salida...

Joder, claro que quería que te quedaras. O sea, ¿te tengo que poner el cartel de sarcasmo o algo?
Joder. Jodeeeeeeeeeeeeer. Ahora me siento sola cuando no hablamos, incluso al estar con más gente, tengo la sensación de que me falta algo. Algo Tú. Y encima yo aquí con los putos fideos estos del yatekomo que son una puta mierda pero me dijiste que querías ramen y ahí voy yo a comprar ramen, aunque no sea ramen de verdad y no te llene nada. Aparte de la tarta, por supuesto, que todo el mundo me pregunta "¿pero es para alguien o porque sí?" y yo "porque sí, para quien venga". MENTIRA. Es mentira, completamente mentira. Y tú te vas. Y me dices que no me haces caso. No jodas, yo creía que estabas fingiendo que estabas en otra dimensión y que yo allí no existía. Puede que empezaras sintiendo algo por mí pero creo que los roles se han cambiado, que pese a nunca ser muy importante en mi vida, ahora lo eres tú más para mí. Es gracioso, ¿no?, cómo cambian las cosas en tan poco tiempo. Que han hecho tres míseras semanas desde que no eras capaz de articular una frase con sentido ni de estar a menos de medio metro de mí sin que se te encendieran las mejillas. Y ahora soy yo la que se sonroja por todo, la que no es capaz de decir lo que siente, la que no sabe qué está haciendo con su vida.
Esta vez no tengo miedo, no sé qué va a pasar ni cómo va a ser mi vida dentro de poco, pero lo que sí sé es que te quiero a ti en ella, que puedo controlarme y no hablarte a todas horas si así consigo no sacarte de quicio, puedo dejar de pegarte y de darte pellizcos para que no me odies, puedo intentar aprender a jugar al starcraft para poder tener más tema de conversación, puedo hacer cualquier cosa con tal de que sigas a mi lado, y eso que me dices cosas feas y bordes por line... y en persona, pero bueno, supongo que compensa.

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