miércoles, 13 de agosto de 2014

Sueño nº...

Estaba en la universidad. Todos lo estábamos, incluso los que nos han dejado cursos atrás. Pese a ir a una carrera de letras, supongo que la impresión me hizo meterme con todo mi antiguo grupo a una clase de biología. La primera clase.
Y ahí estaba yo, entre Miguel y Yago, como solía ocurrir. Ellas empezaban a decirme cosas y yo les respondía, siempre fueron imbéciles, pero el profesor parece que sólo se fijaba en mí, por lo que terminó poniéndome una falta o algo así, momento en el cual me di cuenta de que yo no debería estar allí.
Así que me fui pese a no saber dónde tenía que ir. Tiempo más tarde, fue cuando lo vi a él. Dicen que en los sueños tú inventas los escenarios pero que las personas son reales, gente que has visto por la calle. Me pregunto cuándo diablos lo vi a él y por qué mierda no lo recuerdo. Allí estaba, haciendo el imbécil y yo me subí a sus brazos. Él no entendía nada ni yo tampoco; tenía un tatuaje de mentira entre los labios que me impedía besarle, aunque al fin lo hice. Se parecía a Carlos. Me puso contra él y yo noté lo empalmado que estaba: me dijo que pensaría en mí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario