Me siento mal. Terriblemente mal. Quizás sea por el hecho de que la mitad de mis amigos me guarda rencor y piensa que soy la peor amiga del mundo. Quizás sea porque aún no tengo nada claro que haya elegido correctamente. En todo caso, me siento fatal, y no sé cómo hacer para cambiarlo, porque por mucho que intento compadecerme de mi misma, siempre termino diciendo que vaya hija de puta estoy hecha. ¿A quién se le ocurre dejar de lado a tus amigos? Yo no lo haría ni muerta, y sin embargo ahí estás, mirándote al espejo y pensando que eres idiota. Cariño, no eres idiota, sólo eres una persona que no tiene escrúpulos ninguno. ¿Cómo ibas a tomar esa decisión sino? Además, no lo entiendo. Tú, que tanto miedo le tienes a los cambios, de repente te has convertido en la persona más atrevida del mundo... sinceramente, lo dudo mucho. No lo entiendo, algo así tendría que ser para bien, ¿por qué me da la sensación de que crees que es para mal?¿Crees que tus amigos van a dejar de quererte, tal vez? Bueno, si te soy sincera, no me extrañaría después de lo que has hecho. Has conseguido cargarte cuatro amistades de siete que tienes (y una aún no lo sabe) por el hecho de cambiarte de instituto. ¿A quién se le ocurre? Sabías perfectamente lo que iba a pasar. Sabías que se enfadarían, sabías que podían dejar de hablarte y llevarían toda la razón del mundo.
YA LO SÉ. ¿Crees que no lo sé?¿Crees que si por un momento me hubiera parado a pensar con perspectiva en las consecuencias hubiese elegido ese maldito instituto? Sólo es un instituto, nada más. Un sitio al que sólo vas a estudiar, o hacer como si... pero no creo que sea para tanto, no creo siquiera que sea motivo de tanto escándalo, de tanto enfado, de tanto...
Lo siento, lo siento muchísimo, y sé que no servirá de nada que te diga esto, pero ahora mismo te quiero más que a nadie en el mundo y odio que estés así conmigo, porque realmente me duele que estés así, me duele mucho, más de lo que jamás podrás imaginarte.
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